La gente difÃcil está en todas partes. Tal vez tú también puedas ser difÃcil. Muchas personas pasan por perÃodos en los que no actúan lo mejor posible. Si desea mantener una relación con una persona difÃcil, tendrá que desarrollar algunas estrategias de afrontamiento y negociación.
Examine su propio comportamiento. Si la gente te ataca continuamente, podrÃa ser que estás atrayendo a los tipos equivocados de gente. Por ejemplo, si usted es demasiado negativo, otras personas pesimistas podrÃan acudir en masa a usted. Trate de encontrar amigos que tengan comportamientos positivos.
Minimice sus interacciones. Aunque es de esperar que usted pueda lidiar con su persona problemática, si no, limite su tiempo con ella. Si tiene que interactuar, trate de hacer las cosas cortas excusándose de la conversación o trayendo a un tercero a ! la conversación. Manténgase lo más positivo posible y asegúrese de calmarse después.
Esté consciente de sus percepciones de los demás. Una de tus amigas puede parecer difÃcil, pero podrÃa estar pasando por un momento difÃcil. En lugar de juzgar el comportamiento de los demás inmediatamente, practique la empatÃa dando un paso atrás y reflexionando sobre cómo se sentirÃa en su lugar. Si eres sensible a las diferencias de personalidad, serás más capaz de manejar conflictos diversos.
Aumente su tolerancia a la frustración. El comportamiento de la otra persona está fuera de su control, pero usted puede decidir cómo reaccionará y si se compromete o no. Una manera de hacer esto es aumentando su tolerancia a la frustración, lo que implica desafiar creencias irracionales que pueden llevarlo a estresarse, enojarse o perder la calma.
Sigue siendo educado. No importa la respuesta de la otra persona, mantén la calma. No recurra a insultos. Respir! e antes de responder. La clave es no dejarse hundir al nivel d! e la otra persona. Además, cuanto más tranquilo permanezca, más probable es que la otra persona se dé cuenta y reflexione sobre su comportamiento.
Elige tus batallas sabiamente. Al chocar las cabezas con una persona difÃcil, decida cuándo vale la pena discutir el problema. No todas las peleas necesitan ser peleadas. Cuanto antes te des cuenta de esto, más feliz será tu vida. Idealmente, usted y esta persona difÃcil podrÃan dejar de lado sus diferencias y compromisos. A veces, esto es imposible.
Exponga claramente sus necesidades con una comunicación asertiva. No le dé a la persona la oportunidad de manipularlo o tergiversar sus palabras. Trate de usar afirmaciones de «Yo» en lugar de acusaciones de «usted». Por ejemplo:
Haz una pausa por un momento. Respire profundamente antes de responder para recoger sus pensamientos y calmar sus emociones. Si su conflicto está ocurriendo a través del correo electrónico o de mensajes de texto, trate de! evitar enviar mensajes de texto digitales cuando esté molesto. Tómese un poco de tiempo para dejar que su nivel de estrés disminuya. Entonces usted podrá acercarse a la persona de manera más razonable.
Habla con tus aliados. Si no está avanzando con alguien y necesita hacerlo, hable con un posible mediador. Tal vez su jefe pueda ayudar a mejorar la situación. Si su conflicto es dentro de la familia, busque una parte común que pueda negociar. Esfuércese por compartir las quejas sólo con personas de confianza.
Date cuenta de que siempre habrá gente difÃcil. No importa dónde vivas o trabajes, encontrarás gente que parece que quiere hacer daño a otros. La clave es aprender a tratar con este tipo de gente. Debido a que son imposibles de evitar, puede ayudarle a identificar algunos de los diferentes tipos de personas difÃciles para que pueda decidir la mejor manera de interactuar con ellos. Entre ellas se incluyen
Apéguese a los hechos. Manteng! a una narración corta y clara que no esté empantanada con demasiados ! detalles o emociones. Es muy posible que no seas capaz de hacer que la persona vea tu punto de vista y que no necesites tratar de convencerla. Diga lo que pasó y no sienta que necesita explicarse.
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